Mientras este árbol seguía despedazando a todas las aves que se le postraban, las aves al percatarse de este problema decidieron atacar a este árbol, en una cálida tarde de verano el árbol observo a una gran banda de aves, parecían como mosquitos u atacaron al árbol dándoles picotazos. Los demás árboles, creyeron que las aves perdieron la cabeza o que el árbol tenía muchas frutas y corrieron a su socorro, al llegar espantaron a las aves y estas le dijeron que esto no acaba ahí y se fueron. Los árboles sin tener ni una idea ayudaron a parar al árbol caído. Pero ya sabían que se declaro una guerra y sabían que tenían que prepararse para enfrentar la amenaza.
Las aves fueron muy inteligentes y esperaron al invierno para atacar, ya que en esta estación lo árboles estarían mas débiles y vulnerables. El líder de este movimiento solo tenía un deseo el cual era vengar a su pequeña bandada que fue avasallada por tal árbol. Reunió árboles de todo el mundo, avestruces, pelícanos, buitres, cuervos, ñandúes y sus aliados más fuertes las águilas. Se acercaron temprano luego de una terrible tormenta de nieve, por que necesitaban el aire claro por que era su mejor recurso. Se acercaron tanto por tierra como por aire que parecían como si fuera un gran manto negro que cubría la tierra y en el cielo como nubes negras tormentosas.
Ya estaban cerca se sentía su sed de venganza se acercaron a los pinos y estaban picoteando sus raíces y a su corteza solo se veían los carpinteros acabando con todo. Los pobres pinos solo se podían defender con sus piñas, y agitando sus ramas. El gran árbol asesino solo veía como masacraban y como caía su familia, ellos no hacían mucho efecto contra las aves solo pisaban la tierra y agitando sus ramas con la esperanza de golpear a algunos pero sus movimientos eran muy lentos.
El en la sima solo veía mientras le recorría me lasa por su cuerpo, no sabría con exactitud si eran su forma de llorar o de sudar de terror pero se veía que tenia algo serio pero no contaba es que la batalla se había alargado mucho , ya fueron semanas y cuando llego la primavera todos los árboles fueron golpeados por los rayos del sol se sintieron mar fuertes pero algo le llamo la atención que el gran árbol había desaparecido solo dejando un gran rastro de plumas en su camino.
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